Quizás no sabías que nuestra vecina la Colegiata de Sar albergó en su día el priorato de Santa María la Mayor y Real de Sar. Una hospedería real que en el siglo XI recibía a las personalidades más ilustres de la época.
Es por eso que el nombre de SAR proviene de: “Sus Altezas Reales”.
Más adelante, durante el siglo XIX, el espacio en el que ahora comemos, fue una antigua curtidoría de pieles aprovechando el agua del río que pasa por debajo de sus cimientos.
Un curso de agua que en sus tiempos movía la vida y el trabajo del barrio, ahora inspira la calma y el sabor de las experiencias que ofrecemos en O Sendeiro.